1. Cruz de Mayo en Santos Lugares de Buenos Aires
En la primera semana de mayo, en torno al día 3, Andalucía tiene un
colorido especial cuando la primavera abre sus entrañas, floreciendo
jardines y campos. Es entonces cuando la Cruz, símbolo de los pueblos
cristianos, adquiere un relevante significado.
Como una forma de manifestación popular, todos aportan lo suyo para crear la
Cruz, que después se engalana con flores, macetas, y macetones.
Las plazas y algunos otros lugares destacados en muchos de los pueblos andaluces
pueden verse adornados por artísticas cruces instaladas por las peñas, cofradías, y
grupos de vecinos; cubiertas de rosas, claveles, jazmines, madreselvas,
azahares..., en fin, todo tipo de flores, siendo motivo de manifestación festiva.
Junto a las cruces, se organizan verbenas, con tapas, buenos vinos, cante y baile.
La comunidad andaluza del noroeste del
Gran Buenos Aires, materialmente lejos de
la tierra de origen pero siempre cercana
en las tradiciones, las costumbres y el
sentimiento, no permaneció ajena a esta
manifestación de la fe y del arte popular.
Por ello, reunió a sus asociados y amigos
en su salón social, situado en la localidad
bonaerense de Santos Lugares (municipio
de Tres de Febrero), ambientado y
engalanado para esta especial ocasión. En
el centro del tablado, la Cruz de Mayo,
realizada sobre la base de una cruz de
herrería artesanal, orlada de claveles rojos
con adorno de flores blancas y al pie,
flanqueándola, dos macetas cargadas de
claveles rojos; acompañada del estandarte
Miguel y Ana Simón, integrantes del Centro, a un lado del tablado y un
de la directiva de CECABA, gran mantón extendido entre éste y la
junto a la Cruz de Mayo
Cruz.
Entre los invitados, se encontraba el D. Joaquín Ocaña, integrante de otra de las
instituciones andaluzas hermanas de la República Argentina, el Rincón Familiar
Andaluz, de la ciudad de Buenos Aires, integrantes del Rotary Club de Tres de
Febrero y representantes de los medios de prensa vinculados a la comunidad
española.
2. Hacia las 13,30 horas, mientras comenzaba el almuerzo, el actor hispano argentino
Sergio Poves Campos, actuando como presentador, procedió a la apertura del
acto, exponiendo sobre el motivo de la fiesta y sus orígenes.
Tras las palabras de Poves Campos y antes de comenzar el espectáculo artístico
musical, llegaron los acordes de diversos pasodobles que en forma ininterrumpida,
uno tras otros por más de veinte minutos, motivaron a muchos a salir a bailar.
Al cabo de los pasodobles, Poves Campos anunció el comienzo del espectáculo,
presentando al poeta e intérprete José Antonio (José Antonio Jesús García) quien,
acompañado por Darío Aliste en el fondo musical de guitarra, interpretó diversas
poesías, comenzando con quot;Toito te lo consientoquot;, del autor sevillano Rafael de
León; siguiendo con quot;La casada infielquot;, del célebre fuenterino Federico García Lorca
y quot;Soleá del amor desprendíoquot; del poeta granadino Manuel Benítez Carrasco; para
concluir estrenando un nuevo poema de su autoría, dedicado a su público.
José Antonio recita a poetas andaluces con el acompañamineto a la guitarra de Darío Aliste
Tras la poesía de José Antonio el arte flamenco llegó al tablao, con Claudia
Montoya en el cante (y también en el baile), Fernanda de Córdoba en la guitarra y
Yanina Martínez en el baile; quienes ofrecieron un bien elegido repertorio
integrado con diversos palos del flamenco, comenzando por fandangos de Huelva,
siguiendo por bulerías de Cádiz, para continuar por tientos y otros, desarrollando
un excelente show flamenco; para deleite de un público que hizo notar su
satisfacción con encendidos aplausos y expresiones de júbilo.
3. Claudia Montoya, con voz cálida y natural, sabe llegar a quienes la escuchan con
su modalidad personal del cante, modelando cada detalle con la precisión de una
gran personalidad del jondo. No es de las que esperan que el duende del flamenco
suba al tablao; es ella quien lo lleva, luciendo su gran sentido musical.
Fernanda de Córdoba, joven guitarrista del ambiente flamenco porteño, viene
demostrando su valía en los escenarios argentinos desde hace más de un lustro,
pese a su juventud.
4. Yanina Martínez brillante, como siempre, hizo en esta ocasión un marcado aporte
de auténtica maestría en el baile por tientos, con un despliegue físico y artístico
notable, realzado con la autenticidad que viene de adentro. Realmente, una delicia
escuchar y ver el buen hacer flamenco de éste trío de jóvenes artistas.
Ya sobre el final, invitando a participar al
público, ofrecieron rumbas y sevillanas,
llevando a muchos de los allí presentes al
baile, que siguió posteriormente con
grabaciones de música variada; matizado
con la intervención del cantante melódico
Juan Guerrero.
Fue tarde magnífica, una reunión de
amigos, con el marco de la Cruz de Mayo
en el entorno de la Andalucía tradicional
trasladado, por unas horas, a éste lado del
Atlántico.
Artículo y fotografías: Enrrique Widmann-Miguel (Iberinfo)